Te veo acercarte. En la mirada filamentos de luz. Tus dedos comienzan a tocarme. Inmóvil espero el momento en que hagas sonar mi aldaba y poder abrirme una vez más a tus deseos.
Ahora, las manos contraídas sobre las sábanas, arrugando los bordes de hilos blancos.. las piernas cruzadas sobre tu espalda como una cruz cátara, te acecha mi milagro.
comienza la cuenta regresiva, imparable, inevitable..
funámbulos, tus dedos dibujan pequeñas estrías rosadas sobre el brocal de mi pubis, y sin pensarlo me invaden. se hunden. me inundan. me danzan el agua.
malabar, trapecio, volatina.
la función está a punto de acabar y la ansiedad domina el espectáculo.
nos hamacamos acróbatas a ritmo acompasado, y comienza a brotar el aguamiel de tus adentros..
te siento caer sin red, titiritero sin hilos.
fascinada te bebo en la boca y los ojos.
te veo sacudirte, estremecerte, ahogarte.
luego angelado, tu corazón de saltimbanqui comienza el letargo.. despacio.. despacio..